Es posible que gastemos más de lo pensado en el supermercado, vigilar nuestros gastos siempre ha sido un consejo para proteger nuestra economía, particularmente durante esta época.
Sin un plan adecuado es común pasarse del presupuesto, por eso hoy te comparto algunas ideas que te pueden ayudar a ahorrar:
Planea tus comidas: Acudir al supermercado con una idea clara de lo que vas a cocinar es el primer paso. De esta manera evitarás ir por los pasillos tomando artículos que probablemente no necesites. También te ayuda a reducir el desperdicio de comida.
Lleva una lista para que no olvides nada y sea más fácil comprar únicamente los artículos que necesites.
¿Vas a probar nuevas recetas? No hay nada de malo con hacerlo, pero es importante tomar en cuenta que algunos de los ingredientes pueden ser exóticos o difíciles de conseguir por lo que implica precios más altos. Por eso trata de apegarte a lo que ya conoces o que contenga ingredientes de fácil obtención.
Almacena correctamente: Recuerda que los alimentos perecederos (cómo frutas y verduras) deben ser almacenados de una manera adecuada. Dependiendo del producto y si te es posible utiliza bolsas de plástico y refrigéralos.
No olvides leer las fechas de caducidad de los alimentos enlatados y otros productos para consumirlos a tiempo o desecharlos en caso de que hayan vencido.
Utiliza tu congelador: También puede ser un buen aliado para tu economía, puedes congelar las sobras y consumirlas otro día. Así como otros ingredientes que pueden ser útiles para tu siguiente comida.
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